Hablamos con….

Hablamos con…. Silvia Valero.

1. ¿Cuánto tiempo llevas siendo voluntaria de Bokatas? ¿Por qué empezaste?

Llevo siendo voluntaria unos dos años y medio. Empecé porque mi amiga Pilar me convenció. Yo nunca había pensado hacer ningún voluntariado, era una idea que no se me había pasado por la cabeza hasta que ella me insistió para que me incorporara, porque veía que a mi me podría gustar y que seguro podría aportar muchas cosas, así que me lancé a la piscina.
Al principio, empiezas por probar, conocer gente nueva, piensas que «estoy haciendo algo bueno», pero sin duda no estás preparado para todo lo que este voluntariado te aporta cada día, pese a que hay decepciones y momentos complicados, te hace cambiar tu perspectiva vital, he aprendido muchas cosas y todas las personas que he conocido me han enseñado algo nuevo.

2. Tu lugar preferido de Valencia para hacer ruta

Todos las rutas tienen su historia y sus peculiaridades que las hacen especiales. Yo llevo este tiempo haciendo ruta por una de las zonas más complicadas del centro de Valencia, donde he podido ver como el número de personas sin hogar iba aumentando y cada vez su facilidad para acceder a los recursos descendiendo.
Mi lugar preferido, si pudiera elegir, sería poder hacer rutas zero, visitando en los recursos o en sus alojamientos a las personas que hemos conocido todo este tiempo, y reducir al mínimo las rutas de calle, eso significaría que algo se está haciendo bien por parte de todos los agentes que intervienen en bienestar social, pero sin duda es una realidad que nos queda muy lejos pero por la que seguimos peleando.

3. Lo que más te gusta de Bokatas

Me gusta cuando una derivación sale bien, y damos un pasito más hacia delante.

4. Lo que más te cuesta de Bokatas

Me cuesta la impotencia que siento muchas veces por todas las historias que escuchamos y lo atados de manos que estamos para poder ayudarles muchas veces. Es un camino muy difícil por el que les estamos acompañando y la frustración y la impotencia suelen ser compañeros de viaje, pero con paciencia y mucha pelea conseguimos avanzar.

5. Una persona sin hogar que te haya marcado

Son muchas las personas que he conocido durante todo este tiempo, pero sin duda me quedo con una de las experiencias más difíciles que viví con mis compañeros de ruta y que me recuerda el motivo que me lleva a seguir peleando por la visibilidad de las personas sin hogar.
Carlos fue alguien a quien conocimos en ruta tan solo un día después de haberse quedado en situación de calle, era una persona joven, que te animaba incluso cuando tenías que animarlo tu a él, cada martes teníamos una historia divertida de la que hablar y alguna que otra regañina que darle y al que acompañamos hasta que la realidad de la calle se lo llevó, un poco más de un año después.

6. Como coordinador del Proyecto Valencia, ¿qué experiencia te llevas? ¿Algo que te haya marcado especialmente?

 Pues, de momento, llevo muy poquito tiempo, unos meses y puedo decirte que lo que más me llevo es el compañerismo que tenemos, y las ganas que se desprenden en cada reunión, asamblea o ruta por mejorar cada vez más.
Al principio da un poco de vértigo, porque Pablo, el anterior coordinador, me ha dejado el listón muy alto, solo espero hacerlo igual de bien que él y seguro que con la ayuda de mis compañeros seguiremos haciendo crecer la sede en Valencia. Tenemos muchos planes de ocio nuevos que sacar adelante, eventos, formaciones, reuniones… muchas cosas que van a contribuir a mejorar nuestro acompañamiento en Valencia a las personas sin hogar.
 
¿Algo que me haya marcado? Quizá en la parte de coordinación todavía es pronto para destacar una experiencia en particular. Para mi cada martes y cada asamblea son diferentes y saco momentos buenos y enseñanzas de cada uno, igual que aprendo de cada uno de mis compañeros tanto en sus experiencias de acompañamiento como de sus vivencias personales. Por eso, son muchos los momentos que me marcan dentro de Bokatas, pero aún quedan muchos más por venir seguro.

7. La injusticia más evidente que ves en las personas sin hogar

Quizá el encasillamiento a los que se les somete por parte de la sociedad. Es muy difícil romper los estereotipos que existen en cuanto a las causas que han llevado a una persona a vivir en la calle, la sociedad opta por clasificar a las personas sin hogar (si es que llega a verlas) sin pensar más allá, podemos pensar que es desconocimiento, pero muchas veces pienso que al final la sociedad está instalada en la comodidad y no se cuestionan más allá. Tal vez si supieran que es una realidad que puede suceder en cualquier ámbito y a cualquier persona su percepción de las cosas cambiaría, y bueno, eso es algo que intentamos hacer desde Bokatas con cada una de las acciones de sensibilización que llevamos a cabo.
Si la situación de una persona sin hogar ya es complicada, el rechazo al que están sometidos a diario todavía es peor. Todavía tenemos muchas cosas que cambiar y que mejorar, pero quizá esto es algo que poco a poco podemos ir trabajando.

8. Una cita (no de amor, de frase bonita)

 «Si no puedes volar entonces corre, si no puedes correr entonces camina, si no puedes caminar entonces arrástrate, pero hagas que hagas, sigue moviéndote hacia adelante”. Martin Luther King

9. Un personaje de la historia con el que te tomarías un café

 Me volvería a tomar uno y mil cafés con mis abuelos, son mi historia, y creo que no podría aprender más de nadie que de ellos, todas sus experiencias vitales me acompañan siempre, y el valor de lo que me enseñaron es la mejor herencia que tengo.

10. Una canción, una peli, un libro

  • Canción: Fix you (Coldplay)
  • Peli: El quinto elemento (es lo más, saca mi lado más friki).
  •  Libro: esto es muy difícil… pero te diría que La Flor del mal (Janet Fitch) o Los príncipes demonio (Jack Vance)

Siempre en nuestro corazón

CARTA a P. 

El pasado viernes 24 de noviembre fallecía P. en un hospital. P. estaba en el día a día de muchas personas, pero pocos lo conocían realmente. Para muchos, era una de las personas sin hogar que dormía bajo los soportales de la glorieta de Ruiz Jiménez. Para algunos, era el gorrilla que vigilaba los coches en la Plaza del Conde de Valle Suchil o un parroquiano más de los que visitaban los bares de la calle Acuerdo. Otros, lo conocían de acudir al comedor de la Soki o el de Ave María. Para nosotros, los voluntarios de Bokatas, P. era uno de nuestros amigos más antiguos y una persona que no nos ha dejado indiferentes.

¿Cómo era P ? Era natural de Donosti y estaba orgulloso de ser giputxi, aunque le gustaba vivir en Madrid. Cercano a los 50 años,  aunque aparentaba más, por los muchos años que había vivido a la intemperie. Llevaba más de 10 años en situación de calle. Lucía una larga barba gris y tenía una mirada azul penetrante. Era alto, delgado y procuraba vestir lo mejor posible. Tenía problemas vasculares y con el azúcar, que le causaban molestias en las piernas, agravados por el tabaco y la calle. Era una persona muy inteligente y crítica, con una visión propia del mundo. Era un hombre orgulloso, que prefería trabajar de gorrilla a mendigar. De vez en cuando conseguía algún trabajillo, incluso como vigilante de seguridad, que era lo que le gustaba. Cuando no trabajaba, pasaba el tiempo sus compañeros de calle y, varias veces por semana, con los voluntarios.

Tenía un carácter fuerte y muchas veces difícil, aunque al mismo tiempo era un bromista empedernido. Detrás de su coraza, estaba una persona entrañable, con un gran sentido del humor, al que le gustaba contar chistes, vacilar y hacer reir a los demás.

Sin embargo, la calle y el alcohol fueron deteriorando su salud de manera imperceptible pero constante.

¿Pero quién era realmente P.? Eso se lo llevó con él.  Nosotros tuvimos la suerte de asomarnos a algunos de los momentos más importantes de su vida a través de muchas conversaciones bajo la luz de las farolas. Estas solían empezar con dos caretazos, porque P. no daba dos besos. O bien con un gafotas como saludo, seguido de un par de chistes, si estaba de buen humor.

P.  vivió todas las emociones humanas: desde el amor, la amistad y la felicidad hasta la tristeza, la soledad o la decepción. Con él hemos reído y llorado, hemos disfrutado con sus bromas y le hemos acompañado en su soledad. Nos ha enseñado que el buen humor no está reñido con las circunstancias vitales, que a cada uno le toque vivir.

Gracias P. , por tantos momentos compartidos. Por darle sentido a nuestro estar y acompañar, cada semana. Hemos creado vínculos contigo y tu paso por esta vida ha quedado grabada en nuestros corazones para siempre.

Descanse en paz este amigo, al que la vida probó en tantas ocasiones. Ikusi arte P.¡  Hasta la próxima!

Tus amigos de Bokatas.

CARTA a S. 

El pasado 17 de noviembre fallecía S. en un hospital. Nació en Polonia hace más o menos unos 60 años, y llevaba alrededor de 25 en nuestro país. Llevaba bastantes años en la calle, y casi siempre los voluntarios de Bokatas le veíamos en el Día de la calle Andrés Mellado.

Era sin duda una institución de dicha calle y alrededores. Cuando le veíamos en la ruta siempre saludaba a todo el mundo, y casi todo el mundo le devolvía el saludo. En el mismo Día los empleados siempre le trataban con mucho respeto y educación, y siempre le avisaban cuando cerraban para que no se pillara con la puerta. Pero no solo eran estos gestos, siempre intentaban ayudarle en lo que podían, ya sea con comida o simplemente llevándole a sus casas para que se duchara y arreglara. Y cuando no podía ver a la gente porque tenía que ir a cualquier lado siempre se mostraba molesto consigo mismo, nunca con los demás, por no compartir una conversación, una sonrisa que le hiciera irse feliz a descansar.

Con los voluntarios mantenía también ese trato cercano, y siempre se alegraba mucho de vernos. Se podrían contar infinidad de buenos momentos con S. pero eso daría para un libro. Otro detalle que le caracterizaba era la caballerosidad que mostraba con las voluntarias. Cuando teníamos que irnos para visitar a otras personas sin hogar de la ruta siempre se despedía antes de ellas.

Unos días antes de que tristemente nos dejara, los voluntarios del martes fuimos a verle como siempre hemos hecho. Nos fijamos en que no estaba, pero pensamos que estaría en uno de los bares de la zona viendo el fútbol. Recibimos con sorpresa la noticia de que lo habían llevado al hospital, pero en ese momento no se sabía más. Desafortunadamente unos días después recibimos la fatídica noticia de su partida. Un infarto se había llevado la sonrisa de S., y nos dejó a todos con el corazón encogido.

Muchas gracias S. por todos los buenos momentos que nos has hecho pasar a tu lado y hacernos la vida un poco más alegre. A nosotros nos basta con haber hecho tu vida un poco mejor, y que mientras estuvieras con nosotros olvidaras por un momento la vida de la calle. Siempre ocuparás un hueco en nuestros corazones. Estamos seguros que allá donde estés nos estarás observando con esa sonrisa que te caracterizaba.

Descanse en paz, amigo. Na Zawsze, (hasta siempre en polaco).

Tus amigos de Bokatas.

NADIE SIN HOGAR

SOMOS PERSONAS, TENEMOS DERECHOS, NADIE SIN HOGAR

Somos ciudadanos, seres humanos; hombres y mujeres, nacionales y extranjeros procedentes de diversas partes del mundo (África, Europa, América…)

Somos padres y madres, hijos e hijas, hermanos y hermanas, también amigos de nuestros amigos; estamos casados, solteros/as, divorciados/os y algunos/as viudos/ as… no siempre estamos solos.

Somos inquilinos, chabolistas, usuarios de albergues, de pensiones, de cajero automáticos, de los bancos del parques y calle. A veces sin techo, pero siempre sin hogar. Algunos tenemos enfermedades como la salud mental, algunos sufrimos adicciones, pero la mayoría gozamos de buena salud.

Somos trabajadores, también sufrimos el paro y la precariedad laboral, pero también somos responsables y con ganas de trabajar.

Somos aficionados a la música, al deporte, al cine, a los museos, tenemos hobbys; también nos gusta charlas con los amigos, la literatura, nos gusta quejarnos como a todos y también la siesta. Cada uno tiene sus intereses.

Somos profesores, algún médico y arquitecto, camareros, albañiles, limpiadores…. Muchos tenemos formación y otros no, pero todos aportamos.

NO SOMOS mendigos, vagabundo, carrilanos, pedigüeños, indigentes, vagos, viciosos, vividores, borrachos o yonkis. No somos sucios guarros, aprovechados,
gorrones, subvencionados, violentos o gente deshonesta.

TENEMOS como todos y todas DERECHOS, derecho a la vida, a la libertad, a ser persona.

Tenemos derecho a ir a los hospitales y centros médicos y a ser atendidos como otra persona más, sin menoscabo de nuestra dignidad por estar en situación de calle.

Tenemos derecho a un trabajo digno y a la protección social, que nos permita vivir cuando vengan “mal dadas”.

Tenemos derecho al asilo y acceder a los servicios, trabajo y recursos como un ciudadano más.

Tenemos derecho a un hogar, donde podamos sentirnos seguros, atender a nuestra familia y protegerlos. Tenemos el derecho de acceder a los derechos económicos, sociales y culturales como cualquier ciudadano más.
Por lo tanto PEDIMOS a las administraciones los recursos necesarios y adecuados para poder iniciar una nueva vida y poder salir de esta situación.

PEDIMOS la visualización de esta problemática, de tal manera que sensibilice a la sociedad y que esta no nos ESTIGMATICE. PEDIMOS a los centros que se adapten a las personas que están en situación de calle, para poder iniciar un proceso de inclusión y no solo gestione nuestra pobreza.

Pero nosotros también nos COMPREMETEMOS, NOS COMPROMETEMOS a participar en nuestros centros de referencia, a dar los pasos necesarios para salir de esta situación de calle, a aportar nuestras experiencias a la sociedad para que no se vuelvan a cometer estos errores, a visualizar nuestra situación a la sociedad para que no nos estigmaticen, a ayudar a otros a salir de la calle, nos comprometemos a ninguna persona se sienta sin hogar.